domingo, 10 de marzo de 2013

PASEANDO POR EL RÍO


Paseando por el río,
hoy,
no iba solo:
tus pasos, a veces,
al unísono de los míos,
otras a tu aire,
con los míos cantaban
hollando tantas hojas,
las hojas
que de las ramas fueron arrancadas,
y en el barro dejando
tus huellas y mis huellas,
huellas que hablaban
de caminos hechos
y de mañanas
pues no se diluían.




Hoy,
paseando por el río,
iba pensando en ti:
tu olor me acompañaba,
tu sombra,
(que casi no la había,
la robaron las nubes),
pero tu sombra al fin,
con la mía se enlazaba
como se enlaza un beso
que en larga eternidad
quiere estirarse.


Iba pensando en tí,
hoy,
paseando por el río.
Y no sé si era el agua
quien gritaba
entallada entre rocas
o desplomándose rápida,
o era tu voz
enredada en mi oreja
bailando como aretes
que el ritmo zarandea.


Sí, hoy, hoy,
esta tarde,
paseaba por el río;
no caminaba solo: 
tú me acompañabas.
Por eso te pensaba.
Y ahora, sorprendido, me pregunto:
¿Cómo tú caminabas
por ese río que nunca conociste,
que no mojaron sus aguas
tus pies de caminante enamorada?;
¿cómo conmigo andabas
si nunca saltaste por sus piedras
ni mojaron sus aguas
tu piel y tú sonrisa,
tus sueños y tus lágrimas?

O, ¿cómo puedes tú,
que si hollaste sus sendas
en la misma historia
pero en otro tiempo,
caminar esta tarde conmigo
cuando la lluvia
aparecía como amenaza,
si está tan lejos tu ribera?


Y así,
mientras junto al río paseaba,
solo pero contigo,
y contigo también,
y con ese tú que vuela
y siempre me acompaña,
me descubrí en el río.
y eran sus aguas,
ahora crecidas por la lluvia,
las aguas de la historia,
las gotas de mis lágrimas,
las nubes de mis sueños,
el rumor de mis ansias.
No iba paseando junto al río.
Yo era río,
río no más,
río y alma.

José Luis Molina

Las fotos están tomadas del río Majaceite (Benmahoma-El Bosque)

1 comentario:

Anónimo dijo...

Poema de enamorado para siempre, en un momento en el que casi nadie cree en el amor, en ese amor sellado con eternidad. El amor y los amores fundidos en el Amado. El río del Amado que es la vida, arrastra las aguas calmas y torrentosas de la existencia en la historia. Belleza y calidad poética. Gracias. Miguel.